En el marco de la primera cuenta pública del segundo mandato de Sebastián Piñera, el presidente del Partido Humanista, Octavio González, lanzó críticas a los diputados frenteamplistas Gabriel Boric (MA) y Natalia Castillo (RD) por participar, elegidos personalmente por Sebastián Piñera en la Comisión de Infancia, y cuyas conclusiones fueron presentadas ayer en La Moneda.
Para el humanista, en la llamada comisión “son finalmente opiniones de quienes participaron, incluso sin representatividad. Buenos casos son los del senador Lagos Weber, quien considero no representa a la Nueva Mayoría en su participación en este acuerdo, ni tampoco Gabriel Boric ni Natalia Castillo, pues tampoco representan al Frente Amplio como tal. Fue un ámbito de intercambio y de propuestas, aquí todavía no se presenta ningún avance real”.
González, lamenta que el levantamiento de este encuentro significara el retraso de la tramitación del proyecto de la nueva ley de adopción en el Congreso. Afirmó que el ministro de Justicia, Hernán Larraín, “se había comprometido hace más de dos semanas y media a que se pudiera avanzar en el proyecto de adopción”, impulsado por Piñera durante su periodo anterior.
“Claramente Larraín dio su palabra y Piñera le quitó el piso. Eso significa que hubo un secuestro del proyecto de ley de adopción para que finalmente lo escuchemos este viernes de la voz de Sebastián Piñera porque su narcisismo sólo le permite que él pueda decirle al país en lo que se debe avanzar, olvidándose de la prioridad que es lo más importante: los niños”, sostuvo el timonel humanista.
Finalmente, para González la cuenta pública que dará mañana el mandatario “simplemente nos mostrará ‘parches’ que él considera que hay que colocar hoy sobre la situación actual del país. No escucharemos nada de una mejora de la salud, de la gente que se está muriendo en los hospitales, de un cambio Constitucional ni previsional y no escucharemos nada sobre como reparamos en Chile la tremenda desigualdad que existe”.