El Colegio Médico cuestionó a las autoridades sanitarias de la región de Valparaíso y el país no tomen medidas de resguardo para la salud de la personas en Quintero – Puchuncaví, pese a las mediciones de peaks de dióxido de azufre superiores a lo considerado riesgoso y los llamados de la comunidad pidiendo un actuar menos pasivo de las autoridades.
La mesa directiva del Colegio Médico recordó que “la reciente modificación a la norma primaria para calidad de aire de dióxido de azufre, identifica niveles de alerta, preemergencia y emergencia“, asegurando además que esto “no se ha traducido en un plan operacional y/o actos que protejan la salud inmediata de la ciudadanía”.
La presidenta del Colegio Médico, Izkia Siches, hizo un llamado a las autoridades sanitarias a nivel central y regional a “informar, protocolizar y ejecutar medidas de resguardo de la población según las normas vigentes”.
Declaraciones tras las mediciones superiores a lo permitido detectadas en las últimas semanas, siendo un ejemplo de ello lo ocurrido el pasado jueves, cuando las detecciones superaron los mil microgramos por metro cúbico normalizado de dióxido de azufre en 10 minutos, ocasión en que la única medida que se adoptó fue resguardar a los alumnos al interior de las aulas y suspender las actividades físicas en los liceos municipales.
Algo que genera molestia en los habitantes de la llamada Zona de Sacrificio.
Manuel Pizarro, director del Movimiento por la infancia de Quintero, recordó que ya van 47 días desde la publicación oficial de la nueva “Norma horaria de Dióxido de Azufre”, asegurando que en 25 de ellos se registraron peaks.
Asimismo, aseguró que tanto la norma, las alertas y el plan no sirven, ya que en la práctica se sigue atentando contra la salud de las personas.
En ese sentido, Pizarro pidió que -con el objeto de elaborar un plan de trabajo entre las empresas, la comunidad y las autoridades- se tome en cuenta la sugerencia del ministro de la Corte Suprema, Carlos Aránguiz, consistente en paralizar las actividades productivas por 90 días en la zona afectada.
Dicho análisis, fue efectuado por el ministro cuando el máximo tribunal del país revirtió el fallo de la Corte de Apelaciones de Valparaíso, acogiendo la mayoría de los recursos de protección interpuestos por los episodios de contaminación a fines de agosto de 2018.
Además, hay otros incumplimientos que denuncian agrupaciones ciudadanas. Sin ir más lejos, este martes la directiva del concejo consultivo del Hospital Adriana Cousiño de Quintero, fueron recibidos por una asesora del ministro de Salud, Jaime Mañalich, aunque originalmente la cita era con él, demostrando con esto que en la agenda del nuevo ministro no está cumplir con Quintero – Puchuncaví a pesar que pidieron 10 días para responder si responderán de los compromisos adquiridos por las antiguas autoridades.
Las demandas no son nuevas: subir la complejidad del recinto asistencial antes señalado, aplicar exámenes urgentes de metales pesados a niños, niñas y adolescentes, además de la salida del seremi de Salud, Francisco Álvarez.