La Bahía de Quintero-Puchuncaví cumple un rol estratégico a nivel nacional, al descarga, almacenar, producir y distribuir la energía que ilumina, comunica, calefacciona y mueve a la zona central de Chile, especialmente la Región Metropolitana, pero cuyas externalidades e impactos negativos ambientales, sociales y económicas producto de las actividades energéticas, portuaria e industrial recaen casi en forma exclusiva, en los habitantes de Quintero y Puchuncaví. Zona Franca
La Bahía de Quintero es la principal Bahía Energética de Chile, tanto por las cantidades de hidrocarburos que por ella se movilizan: gas, petróleo y carbón, así como por la generación eléctrica de las 6 termoeléctricas que en ella se emplazan, permitiendo abastecer de energías a más de 10 millones de habitantes y a la mayor parte de las empresas emplazadas de la zona central del país, para quienes las únicas alternativas de abastecimiento de combustible serían la Bahía de Mejillones en la región de Antofagasta (1000 km de distancia) o la Bahía de San Vicente en la región del Biobío a 650 km.
En la Bahía existen 4 termoeléctricas a carbón de AES Gener (AES Andes) con 880 MW, 2 termoeléctricas a gas de Enel con 250 MW, las cuales abastecen con electricidad al sistema interconectado nacional y para cuyo funcionamiento se requiere la descarga de carbón (Puerto de Ventanas) y gas (GNL Quintero). Cabe señalar que GNL Quintero es el principal abastecimiento de gas natural del país, tanto para uso domiciliario como industrial. Por otro lado Oxiquim, y Gas Mar son los principales terminales para gas de petróleo (propano), el cual es empleado principalmente como gas licuado.
ENAP es la principal industria que descarga petróleos por la Bahía a fin de abastecer su refinería en Concón. ENAP y provee aproximadamente el 96% de las gasolinas, el 78% de los Kerosenos y el 53% de los Diesel consumidos en el país. Otras empresas dedicadas a la comercialización de hidrocarburos que se emplazan en la bahía son Copec y Enex-Shell.
En la Bahía Energética de Quintero sus habitantes han sido expuestos a respirar un aire saturado de contaminantes, convivir con reiterados varamientos de carbón, derrames de petróleos, peak de contaminantes, fugas de gases, ruidos molestos, pasivos ambientales, intoxicaciones de niños y riesgo a nuevas fugas e incendios de alguno de las decenas de depósitos industriales (gases, petróleos, químicos) y de los barcos surtos en esta bahía. La comunidad de Quintero y Puchuncaví en su requerimiento de amparo ha sido abandonada por los tribunales, la institucionalidad ambiental, sanitaria y, marítima, así la Bahía de Quintero se transformó en el mejor ejemplo de un Estado Fallido, incapaz de velar por la garantía constitucional a vivir en un Ambiente libre de Contaminación.
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Hoy la comunidad de Quintero y Puchuncaví en forma decidida, se ha levantado para exigir justicia y equidad por las negativas consecuencias de vivir en esta Bahía Energética, exigiendo un precio justo a los combustibles y energía eléctrica consumida por los habitantes de Quintero y Puchuncaví, decretando una “Zona Franca Energética”, lo que permitiría dar una mejor calidad de vida de sus habitantes, similar a lo que ocurre en la Región de Magallanes con el subsidio al gas de pero en este caso ampliado a bencina, petróleo y electricidad.
Finalmente hacer un llamado a los Candidatos presidenciales a referirse al proyecto de Ley de “Zona Franca Energética para Quintero y Puchuncaví”, indudablemente será Gabriel Boric como hombre de Magallanes que conoce el subsidio a gas entregado en esa zona del país quién podrá entender de mejor manera y empatizar con este requerimiento y comprometer un proyecto de Ley para su materialización.
Hernán Ramírez Rueda
Licenciado Tecnología de la Información
Diplomado en Política y Gestión Ambiental
