El concejal Eduardo Veas, fue la única autoridad que estuvo con los vecinos que tiraron monedas, gritaron contra los integrantes de la comisión y levantaron pancartas. Fue el minuto de furia de un grupo de habitantes de Puchuncaví y Horcón, quienes se manifestaron en contra de la aprobación del proyecto «Desarrollo Urbano Habitacional Maratué de Puchuncaví en Quirilluca».
El proyecto inmobiliario contempla la construcción de 14.840 viviendas en un plazo de 45 años en un sitio prioritario de conservación natural, los acantilados de Quirilluca.
En el mismo sector se encuentra un bosque nativo, entre ellos la especie belloto norte que está en la categoría de vulnerable por el Ministerio de Agricultura.
Zona saturada
Los terrenos de la polémica son de la familia Leria, quien a través de la Inmobiliaria El Refugio dieron a conocer hace casi dos años el proyecto, que fue rechazado de inmediato por los locales.
«Nosotros vivimos en una zona de sacrificio donde año tras año han estado violando nuestros derechos fundamentales, de ellos ya no esperamos nada. Hubiese sido demasiado esperar que votaran como correspondía, dimos argumentos de peso, hay permisos sectoriales que no están aprobados», afirma Nicole Varas, representante de la comunidad de Horcón.
«La gente de Puchuncaví es pobre. No es posible que se construyan 14.840 , viviendas para la clase ABC1 cuando acá hay gente que no tiene locomoción, agua potable y alcantarillado», asegura Javiera López, representante de la comunidad.
Llevaran a la justicia Quirilluca.
Una vez aprobada la Resolución de Calificación Ambiental, el proyecto debe ahora ser analizado de manera sectorial por los organismos públicos correspondientes.
Sin embargo, tanto vecinos como autoridades regionales anunciaron que recurrirán a la justicia para paralizar las obras en Quirilluca.
«No se puede entregar ninguna garantía para pensar en triplicar la población de Puchuncaví que se compone de 18 mil habitantes y como autoridades regionales vamos a recurrir a tribunales ambientales para que sean estos organismos los que se pronuncien si efectivamente puede darse continuidad a la RCA o revocarse», dijo Tania Valenzuela, consejera regional.
Inmobiliaria
Sobre la aprobación del proyecto la inmobiliaria a través de un comunicado aseguró que además de las viviendas está contemplada una «Zona de Conservación ambiental de 125 hectáreas, y más de 400 hectáreas para áreas verdes, corredores bióticos y protección de humedales», y que «Maratué es un proyecto innovador que responde a los desafíos sociales y ambientales de Puchuncaví, combinando distintos tipos de viviendas con una amplia zona de conservación. Después de casi 7 años trabajando en el diseño y planificación de Maratué, ahora podremos avanzar en los próximos pasos que garanticen el correcto desarrollo del proyecto».
